19.5.23

Fotografía de agua, poco habitual


El agua tiene muchas maneras de presentarse ante nosotros como espectadores de sus movimientos. El agua es eso, movimiento y es complicado fotografiarla para que transmita, pues una fotografía no tiene sonido, ni es capaz de capturar el movimiento, ni de mostrarnos sus constantes cambios de forma.

Así que con el agua debemos jugar a que nos parezca "otra" cosa, a que la capemos con un punto de vista no habitual, distinto, a veces casi extraño. Y el agua entonces nos puede engañar momentáneamente. Sus cambios de formas, sus brillos, incluso con una luz mala, puede dejarnos puntos de vista en una fotografía, que resulten poco habituales.

La arquitectura nos puede ayudar, el punto de vista, pero sobre todo elegir el encuadre y las formas de esa agua que a veces podemos lograr que se parezca poco a una simple agua.