El cuadro de la familia real danesa está levantando críticas
y opiniones nada amables. El artista Thomas Kluge ha plasmado a toda la
familia, destacando al Príncipe heredero en primer plano, con una iluminación
baja que le confiera una sensación tenebrosa que envuelta la obra en tonos
oscuros y un paisaje copiado de otra obra histórica en Dinamarca, completan una
sensación “de miedo”.
Tal vez el error esté sobre todo en la figura del príncipe
heredero, fuera de tamaño proporcional por decisión del artista pero con la iluminación
más marcada que en el resto. Más que una obra pictórica parece una fotografía
retocada en exceso.
Dejo la obra completa y un detalle del rostro de la figura
principal.