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14.9.25

Pepito Costa, obra de Goya


Esta obra de Francisco de Goya nos muestra a un niño disfrazado de militar y sus juguetes, incluido aparentemente un fusil de salto, y que se llamaba Pepito Costa y Bonells (José de adulto, murió 60 años después de haber posado para esta obra), en donde vemos claramente la forma de trabajar de Goya. 

Pintaba una base sobre el lienzo de color rojo terroso y sobre ella iba pintando el resto de tonos, dejando la base a veces sin pintar para matizar los colores.

Lo podemos ver en el fondo gris, pero también en los márgenes del blanco espléndido del traje, super luminoso por esos contrastes con un blanco que se más o menos opaco para dejar traslucir el rojo tierra del fondo, consiguiendo unas transparencias fabulosas.

Este cuadro se encuentra en el Museo MET de New York.

El niño viste de militar a juego con el tambor, el caballo y el rifle y lo hizo en el año 1810 reflejando tal vez que incluso los niños tenían que ayudar en la defensa de la Guerra de la Independencia. Era un niño hijo del médico Rafael Costa de Quintana profesional personal al servicio del Rey Fernando VII. La obra tiene casi un metro de altura.

5.8.25

Por qué surge la abstracción en el arte?


La idea fundamental y que dio inicia a la abstracción fue la de liberar la pintura de la representación directa del mundo visible y usar formas, líneas y colores como lenguaje propio. De alguna manera quería separarse de la fotografía como forma artística que surgía con fuerza y entendían que poco a poco iba a influir en el Arte.

Había en ese final del siglo XIX y principios del siglo XX una crisis de la representación, que se rompe, cambiando el paradigma renacentista de imitación de la naturaleza por la influencia del impresionismo, el postimpresionismo y las exploraciones de Turner y Monet.

Había en aquellos años un creciente interés por nuevas formas de conocimiento, descomposición del átomo, ideas filosóficas que buscaban una base común a todas las disciplinas, teorías sobre la percepción, espiritualidad, teosofía o simbolismo.

El artista huye de la figuración para buscar lo esencial, una "música visual", formas puras, colores que expresan lo invisible y lo inefable. Quiere romper con la tradición de un Arte al que se empieza a considerar viejo.

La abstracción busca paralelismos con la música (éxito de la atonalidad y el dodecafonismo contemporáneo a Kandinsky) y con las teorías cromáticas, matemáticas y geométricas.

Hay una inquietud existencial y una creciente ansiedad en esa época. La modernidad y el desencanto frente a un mundo cambiante, caótico y conflictivo, lleva al arte a buscar refugio en lo intangible y a experimentar con formas no representativas.

Y también hay un crecimiento del cosmopolitismo que busca redes de vanguardia que representen retos. Movimientos como el Orfismo, Rayismo, Futurismo, Suprematismo o Neoplasticismo se influencian mutuamente entre París, Moscú, Berlín y otras capitales culturales europeas sobre todo.

La abstracción pictórica surge como respuesta al deseo de expresar una realidad "más allá de lo visible", ante la crisis del arte tradicional representativo. El impulso de la modernidad, la espiritualidad, la ciencia y la exploración psíquica y sensorial hacen el resto.

Surge el anhelo de libertad formal y la experimentación con el color, la forma y la composición pura no buscando que se vea lo que siempre se ha visto, lo real. Así, la abstracción rompe con seis siglos de arte figurativo occidental para convertirse en uno de los motores fundamentales de la 
vanguardia artística del siglo XX.

La obra que vemos arriba está considerada como la primera acuarela abstracta" de Wassily Kandinsky, realizada en 1910 y titulada "Composición 1", es considerada una pieza fundamental en la historia del arte abstracto. Aunque existen debates sobre su fecha exacta, se reconoce como un hito en la transición de Kandinsky de la figuración a la abstracción. La obra es una acuarela de 49.6 x 64.8 cm, y se encuentra en el Centro Pompidou de París.

Cuándo nace la abstracción pictórica como corriente artística?


La abstracción pictórica surge entre finales del siglo XIX y los primeros decenios del siglo XX, y su consolidación como corriente pictórica reconocida ocurre entre 1908 y 1914. Durante este período, varios artistas y movimientos en Europa reemplazan la representación figurativa por formas, colores y estructuras que no derivan de la realidad observable.

La abstracción pictórica como corriente artística reconocible nace a comienzos del siglo XX, aunque sus raíces se remontan a décadas anteriores.

Hay un consenso general entre los historiadores del Arte en que la abstracción como lenguaje autónomo, en este caso como pintura que no representa nada del mundo visible, sino que se expresa a través de formas, colores y ritmos propios, se consolida a lo largo del siglo XX, en sus dos primeras décadas.

El Impresionismo y Postimpresionismo abren camino a la ruptura figurativa en esos primeros años de abstracción, Hilma af Klint realiza obras abstractas pioneras, motivadas por la espiritualidad, Kandinsky se consolida como pionero formal de la abstracción lírica y musical desde la pintura, Se desarrolla la abstracción en París y Alemania: Orfismo (Delaunay), Expresionismo, Suprematismo, Rayonismo, Sincromismo, etc. y Kandinsky publica "De lo espiritual en el arte", teorizando la abstracción.

Tras la primera década del siglo XX, las "Nymphéas" de Monet y la obra de Turner marcan antecedentes conceptuales, Kupka, Mondrian y Malevich desarrollan abstracción geométrica y pura, y a partir de 1920, la abstracción se impone como nueva sensibilidad, rompiendo definitivamente con la tradición figurativa.

Van surgiendo precursores en el simbolismo y postimpresionismo, como Odilon Redon, los últimos Turner, y ciertos paisajes de Monet, que rozan la abstracción, Piet Mondrian, entre 1912 y 1917, evoluciona desde el cubismo hacia la abstracción pura, dando lugar al neoplasticismoo De Stijl, basado en líneas rectas, colores primarios y orden geométrico, mientras Kazimir Malévich desarrolla el suprematismo en Rusia, una forma radical de abstracción basada en formas geométricas puras, como el Cuadro negro sobre fondo blanco en el año 1915.

Os dejo dos obras de la artista sueca Hilma af Klint, pionera del Arte Abstracto, ambas pintadas en el año 1907, la de arriba titulada Vejez y la de abajo titulada Madurez. 



27.7.25

Don Quijote, dibujado por Daniel Urrabieta Vierge


Este dibujo del artista Daniel Urrabieta Vierge se utilizó para una edición de El Quijote del año 1916. Hay tantos Don Quijote como lectores, y sin ninguna duda como los múltiples artistas que lo han ido recreando para facilitarnos nuestra imaginación.

En este dibujo se decía: La doncella barbera, cuando le tuvo con un palmo de jabonadura, fingió que se le había acabado el agua y mandó a la del aguamanil fuese por ella, que el señor don Quijote esperaría. Hízolo así, y quedó don Quijote con la más extraña figura y más para hacer reír que se pudiera imaginar.

30.6.25

La Fragua de Francisco de Goya


La obra La fragua de Francisco de Goya, pintado alrededor de 1819 y de 182 centímetros de altura, fue realizada muy posiblemente para su casa de Madrid, para la Quinta del Sordo. Actualmente se exhibe en la Colección Frick, Nueva York.

Eran tempo de muy pocos encargos oficiales durante la Restauración absolutista en España, lo que le permite a Goya desarrollar su ingenio pictórico como nunca. En este cuadro se ve una pequeña metáfora, en la que tres hombres trabajando en la fragua, los herreros agrupados en torno al fuego son el pueblo español y el hierro el ejército francés. Tiene ciertos ecos de Rembrandt y Velázquez.

Es muy probable que Goya tuviera la ocasión de observar esta misma escena para poder captarla con ese verismo. De hecho, existe un dibujo del Álbum F que repite la misma composición y que podría haber sido realizado como un apunte del natural en el lugar de visita.

La paleta que Goya empleó en esta obra es bastante oscura. El uso del color negro adelanta ya el período artístico de los últimos años de Goya. Pintado al óleo sobre lienzo es curioso que se vendió en el año 1853 por Christie's de Londres por 10 libras.

15.6.25

Zaragoza, Goya y la Tauromaquia


Si queremos entender los motivos por los que Goya decidió hacer una seria de Grabados sobre la Tauromaquia, visto desde este siglo XXI, puede costarnos algo, tanto el entenderlo como el ejercicio de aprobarlo. Pero hay que irse al siglo XVIII para comprender algunas motivaciones imprescindibles.

La primera es que Goya necesitaba trabajar para vender sus obras y poder vivir o incluso sobrevivir. Y en aquellos años de principios del siglo XIX, los toros eran un espectáculo imprescindible entre la sociedad media y alta de Madrid o de incluso Zaragoza, de donde venía Goya.

Los toros y las comedias eran los únicos entretenimientos de la época, más los primeros que los segundos, pues eran otros tiempos, otras culturas, otras economías. 

En Zaragoza, en el año 1761 la Sitiada o Gestora de la Real Casa de la Misericordia decidió construir un Coso Taurino para financiar sus labores sociales para los niños sin hogar. Eso suponía aceptar que iba a ser un gran y rentable negocio para ayudar a su sociedad.

Ramón de Pignatelli logró un acuerdo en 1764 con el gremio de carpinteros de Zaragoza, para poder construir un plaza de toros en el mismo lugar en donde todavía ahora se encuentra el coso taurino de Zaragoza, la llamada todavía Plaza de la Misericordia.

El terreno vacío —o casi vacío pues eran una eras para trillar el cereal de los campesinos zaragozanos— estaba en la salida de Zaragoza hacia Madrid, cerca del Portillo. Y la Plaza de Toros se levantó con los mismos planos arquitectónicos que se utilizaron en la plaza de Aranjuez.

Se pretendía crearla para unos 7.800 espectadores que eran muchos para aquella ciudad pequeña de poco más de 40.000 vecinos, y su coste estimado era de unas 34.000 libras jaquesas, que era la moneda de aquellos tiempos en Aragón. 

Al Gremio de Carpinteros se le pago a plazos hasta el año 1773, e incluso consta que regaló las últimas 1.600 libras a la Real Casa de la Misericordia.

A partir de las Fiestas del Pilar de 1764 se iniciaron las corridas de toros, o los festejos taurinos, pues muchas veces eran un compendio de diversas maneras de torear, o de teatralizar la lucha entre un animal y los hombres. Sin contar a los pobres caballos que caían como moscas.

Volvamos a Goya, pues vemos arriba un grabado de 1816 titulado con el número 18 de su colección Tauromaquia, "Temeridad de Martincho en la Plaza de Zaragoza". Es un aguafuerte y aguatinta de Goya.

Goya no refleja una disposición personal fácil y aceptada con estas prácticas, pues a veces solo muestra las partes más duras y sangrientas de las mismas, y parecen más una serie de grabados que buscan relatar la historia de la tauromaquia en España, desde tiempos de los árabes, o incluso antes, por orden numeral de sus grabados, que obras artísticas para mostrar el presunto arte taurino.

Eran otros tiempos, eran estampas impresas para vender casi como recuerdo para los que sí gustaban de estas actividades y sacar unos dineros extra.


14.6.25

Brochazos de Goya, casi abstractos


Esta obra de Francisco de Goya mostrando al Rey Fernando VII no es la más conocida del monarca y de Goya. Pintada en el año 1815 vemos como detalla el Toisón de Oro que como condecoración lucía el Rey en la pintura.

En realidad traigo esta obra y su detalla para ver de cerca el tipo de brochazo que Goya utilizaba en sus obras, y que a veces le valió para serios disgustos como en Zaragoza con sus obras del las cúpulas del Pilar.Goya no buscaba una imitación literal de la realidad, sino una comunicación emocional e intuitiva de sus obras con el espectador. Él sabía que el ojo humano completa lo que el pincel sugiere, y que una pincelada cargada de intención puede decir más que mil detalles minuciosos.

Cuando Goya pintaba al fresco (como en la cúpula de San Antonio de la Florida en Madrid), debía trabajar rápido, sobre yeso húmedo, y en techos curvos o altos. Esto obligaba a un estilo más suelto, más gestual, casi impresionista.

Utilizaba pPinceladas sueltas, abiertas, casi sin contornos definidos. Las formas emergen de la luz y el contraste, usando colores planos o ligeramente matizados, con zonas casi abstractas si se observan de cerca. Lo que parecen manchas desde cerca, se transforman en rostros, ropajes, cielos al alejarse la mirada muchas veces por la obligación de la distancia a la que se colocaban sus obras.

Este modelo de brochazo en su pintura, es de alguna manera precursor de los impresionistas y expresionistas del siglo XIX y XX. Goya no solo pintaba, interpretaba la condición humana con una técnica que era en sí misma lenguaje. Esa mezcla de aparente descuido técnico y profundidad emocional lo convierte en precursor de lo moderno: del impresionismo, del expresionismo, incluso del arte abstracto.



30.5.25

El Arte Americano de principios del siglo XX (1)


El Arte Americano ha crecido, se ha conformado o al menos lo ha intentado, fuera de las indicaciones del Arte Europeo. Cosa complicadísima. Vamos a empezar a conocer algo de solo seis artistas americanos de hasta mitad del siglo XX, pero empezar a adentrarnos un poco en este tema. Son solo seis, elegidos por su importancia que todavía conservan en este siglo XXI. Eso supone dejar atrás a muchos otros artistas, de momento.

América del Norte, principalmente EE. UU.:

Mary Cassatt (1844-1926): Una figura estadounidense clave del Impresionismo, célebre por sus sensibles retratos de la vida de mujeres y niños. ¡Supo hacerse un hueco en un París dominado por hombres!

Edward Hopper (1882-1967): El pintor de la soledad y la quietud en la vida moderna estadounidense. Sus escenas urbanas y rurales tienen una atmósfera inconfundible y un poco melancólica.

Georgia O'Keeffe (1887-1986): Considerada la "madre del modernismo americano". Es famosa por sus innovadoras pinturas de flores a gran escala, rascacielos neoyorquinos y los paisajes desérticos de Nuevo México.

De América Latina o América del Sur:

Diego Rivera (1886-1957): Uno de los "tres grandes" muralistas mexicanos. Sus enormes frescos, cargados de contenido social e histórico, narran la vida y las luchas del pueblo mexicano y tuvieron una influencia global.

Tarsila do Amaral (1886-1973): ¡Una verdadera pionera del modernismo en Brasil! Su obra es vibrante, llena de color local y fue fundamental en el movimiento "Antropofagia", que proponía "digerir" las influencias europeas para crear un arte genuinamente brasileño. Su cuadro "Abaporu" es un ícono.

Joaquín Torres-García (1874-1949): Este artista uruguayo fue un visionario que llevó el constructivismo a América Latina. Creó el "Universalismo Constructivo", una filosofía y estilo que buscaba integrar el arte moderno con símbolos ancestrales americanos.

Estos seis artistas ofrecen una ventana increíble a la riqueza y diversidad del arte en las Américas durante esa época. Cada uno tiene una historia y un impacto que merece la pena explorar.

La imagen que vemos es de la primera artista de las nombradas, la norteamericana Mary Cassatt, un cuadro del año 1897 que tituló: Desayuno en la cama.

22.5.25

El rey don Rodrigo arengando a los jefes de su ejército antes de dar la batalla del Guadalete


Este cuadro histórico del madrileño Bernardo Blanco y Pérez, lo pintó en el año 1871 al óleo sobre lienzo, y la tituló "El rey don Rodrigo arengando a los jefes de su ejército antes de dar la batalla del Guadalete". No es muy grande pues tiene 78 centímetros de anchura, para una gran obra con mucho detalle y un gran número de personajes. Se nota en su trazo que era un ilustrador y pintor.

Se encuentra en el Museo del Prado, y vemos al Rey Don Rodrigo sobre un carro con dos caballos blancos, arengando a sus tropas antes de la batalla.

Según los escritos de la época, el rey godo Don Rodrigo había acudido a la batalla sentado en su trono, que llevaba dos mulos, ceñido con su corona y cubierto con todas las joyas con las que se adornaban los reyes; y de esta manera intentó avanzar hacia la montaña donde estaba sentado Taric.

Esta famoso batalla tuvo lugar entre el 19 y el 26 de julio del año 711 (aunque algunas fuentes señalan el año 712) cerca del río Guadalete aunque también hay dudas del lugar exacto y cuyas consecuencias fueron decisivas para el futuro de la Península.

En esta batalla el rey visigodo Rodrigo fue derrotado e incluso se piensa que pudo perder la vida a manos de las fuerzas del Califato Omeya comandadas por Táriq ibn Ziyad. La derrota fue el comienzo de la rápida caída del Estado visigodo y la entrada en toda España de la dominación árabe. Los visigodos tenía un poder militar y una estabilidad social y política muy mermada por luchas internas por la sucesión al trono.

14.4.25

Santiago Ramón y Cajal artista pintor


El científico y Premio Nobel español Santiago Ramón y Cajal, además de ser médico e investigador, fue un pionero de la fotografía en España y artista dibujante y pintor, una faceta menos conocida. Sobre todo la de pintor de paisajes, pues sí son muy conocidos sus apuntes dibujados de partes del cuerpo humano, para sus clases de medicina.

Esta obra paisajística la pinto en el año 1878 y nos muestra el Fuerte de Santa Elena en Biescas (Huesca), un cuadro de la colección privada de Ángel Cañadas Bernal.

Este fuerte iniciado en el siglo XVI como un lugar de defensa militar fue casi destruido en la Guerra de la Independencia y reconstruido en el año 1884  1889, es decir, este cuadro fue pintado cuando el Fuerte de Santa Elena eran restos de un lugar estratégico.


7.4.25

James Ensor y su obra La entrada de Cristo a Bruselas


James Ensor
fue un artista belga (familia inglesa) que en sus inicios se convirtió en un excelente grabador surrealista para terminar su carrera artística olvidándose del grabado y dedicándose solo como pintor.

Entre 1886 y 1905 Ensor fue un prolífico grabador que ejecutó 134 grabados. Dejó escrito: "Le temo a la fragilidad de la pintura. Quiero sobrevivir y pienso en planchas de cobre macizo, en tintas inalterables de impresión precisa y estoy adoptando el aguafuerte como medio de expresión".

Muchos de esos grabados (aguafuertes sobre todo) los coloreó a mano varios años más tarde, volviendolos obras únicas. La serie de los "Siete pecados capitales" es un ejemplo. Muchos de esos grabados los usó como base o boceto para pinturas posteriores.

Su cuadro más conocido es "La entrada de Cristo a Bruselas" pintado en el año 1888, considerado una de las primeras obras del expresionismo. Actualmente esta obra se conserve en el Museo Getty de Los Ángeles en EEUU.

Arriba vemos un grabado y abajo su cuadro más famoso.



22.3.25

Goya y una niña de Zaragoza en la guerra


Si Goya fue el último gran maestro antiguo o el primer genio moderno es un dilema espurio: no se situó en la frontera entre dos épocas; él mismo era la frontera. Antaño fue celebrado por sus despreocupadas decoraciones de los palacios reales y sus grandiosos retratos. Pero Goya cambió y fue mucho más.

El Goya más admirado en la actualidad es el que abrió la modernidad social y, por primera vez, liberó los demonios internos del alma humana y los horrores de la guerra. No sabemos bien si Goya fue el último gran maestro antiguo o el primer genio de la edad moderna en la pintura, pues él mismo era la frontera.

La obra que vemos, La Aguadora, lleva la marca de ambas maneras de ser de Goya. A primera vista, parece un simple cuadro rústico de género: una joven zaragozana, encantadora, lleva agua y comida a alguien.

Pero cuando se pintó este cuadro, España ya había sido saqueada por las tropas de Napoleón. Es guerra lo que vemos aquí: el agua es necesaria para los héroes anónimos de Zaragoza, que detuvieron a los invasores prácticamente con sus manos desnudas. No es el sufrimiento lo que domina pero Goya utiliza la figura de la niña para poner en valor mucho más que los disparos o los heridos, nos habla de la Intendencia, ese trabajo heroico, obstinado y cotidiano de un pueblo que busca cambiar el mundo.

19.3.25

Francisco de Goya y El Afilador


El Afilador es una obra de Francisco de Goya realizado sobe 1810, y que se cree fue una obra realizada para decorar la zona de la puerta interior de su casa en Madrid, junto a La Aguadora y Las mozas del cántaro.

Esta obra está en la actualidad en el Museo de Bellas Artes de Budapest por una sucesión de ventas que terminaron en la capital de Hungría.

Es una clásica fotografía pictórica de personajes de la época, que intenta mostrar desde la calma una imagen bélica de aquellos tiempos. Un hombre afilando cuchillos para la guerra contra los franceses.

Un cuadro realista con una persona en su trabajo, árido en sus formas y remangado como advirtiendo de que estaba dispuesto a todo. El afilador nos mira, sabe bien que le estamos observando y aunque parece cansado sabe que su obligación es no descansar en aquellos tiempos durísimos.

Es una pintura al óleo sobre lienzo de casi 70 centímetros de altura que ha viajado en tres ocasiones a Madrid, al Prado, en los años 1988, 1993 y 2008.

17.3.25

Dibujo de Goya. Duque de Wellington


En el Museo Británico figura este dibujo realizado por Francisco de Goya de una cabeza del Duque de Wellington hecho con tiza roja y negra más grafito (sanguina) sobre papel y realizado en el año 1812. Este dibujo fue propiedad de Javier Goya y Bayeu, de Mariano Goya y Goicoechea, de Valentín Cardedera y de Colnaghi, Londres. Fue adquirido por el British Museum en 1862.

Este boceto representa a Arthur Wellesley, el futuro duque de Wellington, que era el comandante de las fuerzas británicas en España y Portugal cuando España y sus aliados lucharon para expulsar a los franceses durante la Guerra de Independencia. Wellington lideró una importante victoria británica el 22 de julio de 1812 cuando el ejército derrotó a los franceses en la batalla de Arapiles, cerca de Salamanca. El duque llegó a Madrid el 12 de agosto cuando los franceses, que habían ocupado la ciudad desde 1808, comenzaban a irse.

El dibujo de Goya lo muestra agotado y debilitado por la campaña. Lleva una expresión de resignación y abatimiento o tristeza. Se cree que este dibujo preparatorio lo hizo Goya del natural, estando posando el propio Duque de Wellington.

El dibujo es preparatorio para su retrato ecuestre, pintado mientras Wellington estaba en Madrid. La pintura se exhibió en septiembre de 1812 en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Goya también tenía la intención de usarlo para una impresión en grabado, ya que el papel muestra una fuerte marca de placa (el resultado de que la hoja se envuelva alrededor de la placa), mientras que el espacio debajo del dibujo permitiría una inscripción.

El dibujo fue adquirido por el Museo Británico con una carta del nieto de Goya, Mariano, en la que menciona descubrirlo escondido por Goya con otras impresiones. Él describe el dibujo 'Un dibujo hecho en Alba de Tormes después de la batalla de Arapiles del Duque de Weelingthon por el q.e se hizo el retrato'. Tanto la carta como el dibujo están anotados por Valentín Carderera. Su inscripción debajo del retrato de Wellington identifica tanto al cuidador como a la función preparatoria del dibujo.

Este dibujo fue publicado como un facsímil en color por el Museo Británico en "Reproducciones de dibujos de viejos maestros en el Museo Británico", Parte III, publicado por los fideicomisarios, en 1893, y se describió allí como "Francisco Goya, retrato del duque de Wellington".

15.3.25

La Grenouillère, de Renoir y de Monet


El cuadro "La Grenouillère" fue pintada a la vez por dos artistas muy conocidos y amigos, que se llevaron al mismo lugar sus herramientas de pintura para plasmar la misma escena en el mismo momento. 

El resultado siendo similar es claramente distinto entre ellos, no tanto en sus técnicas que eran similares, como en la selección del encuadre, el tratamiento en la escena de las personas o del color y contraste del suelo de las barcas para dar mayor o menor protagonismo visual a una parte u a otra del cuadro. 

El de arriba es de Auguste Renoir, y el de abajo de Claude Monet. Pintados ambos en 1869.

A este último no le debió gustar especialmente el resultado pues advertía que era un simple boceto para una obra grande que no se conserva. 

Es una obra doble de los comienzos del impresionismo, pintadas al natural, de forma rápida, y en donde había que elegir sobre todo las posiciones de los elementos que se movían, pues el tiempo aunque breve era suficiente para que nadie ni nada permaneciera estático. 

Renoir quiso detallar más los vestidos y la reunión o fiesta de las personas, mientras que Monet jugó más con la estética limpia, con un círculo al que rodeaban elementos que se dirigían hacia él. 

Todo parece obligarnos con sus líneas a tener que mirar el boceto de Claude Monet.  En cambio el de Auguste Renoir juega más con un movimiento lateral que desde la derecha nos obliga a mirar la escena central. 

Para finalizar, solo un pequeño detalle. El tratamiento del agua del lago y sus brillos es tremendamente similar en ambas obras. 



12.3.25

Sagrada Familia del pajarito. De Murillo y de la reina Isabel II


Aquí vemos dos secciones de un cuadro titulado "Sagrada Familia del pajarito" pero una es la auténtica y la otra es una copia de Isabel II. Una fue pintada en el año 1650 y la otra en el año 1848. Las diferencias en matices son claros.

La reina Isabel II era una gran amante de las Artes, y además de intentar dentro de su época por instruir a las mujeres para que salieran de las labores del hogar, y claro, me estoy refiriendo a las mujeres de alta posición, era una pintora de niña y joven, pues era una actividad para la que tenia un maestro o maestra que les enseñaba. En este caso fue la pintora Rosario Weiss.

Isabel II llegó a participar en exposiciones colectivas en Madrid, pues sus trabajos de copistas era bastante bueno. La obra de Isabel II, la del detalle de arriba, ha sido expuesto recientemente en Zaragoza y Valencia, y es propiedad de Patrimonio Nacional. La de abajo es la de Bartolomé Esteban Murillo.





20.1.25

Perro semi hundido, de Goya. ¿Qué miraba?


Del llamado "Perro semihundido" de Francisco de Goya sabemos lo que podemos, y a su vez sabemos que no sabemos todo. Era una obra sobre pared en su casa de Madrid, desde donde también se sacaron las famosos Pinturas negras, en en el traslado se perdió parte de la obra, y se retocó posteriormente.

Se conserva una fotografía de J. Laurent realizada en el año 1874, desde el interior de la Quinta del Sordo en donde estaba esta obra de "El Perro", posiblemente con iluminación eléctrica, lo que no garantiza todo lo que allí se veía pues como es lógico, la imagen es en BN y además posiblemente con filtro o con un objetivo que los amarillos y naranjas los trasladaba algo más potentes. La fotografía se hizo poco antes de proceder al arrancado de las obras

El caso es que esta obra que está en el Museo del Prado nos muestra a un perro que mira a la nada, como distraído, sin saber bien qué hace en esa posición. La obra se pinto sobre 1820 a 1823, no se puede concretar pues no se sabe bien en qué orden hizo las obras de su casa de la Quinta del Sordo.

Las Pinturas Negras se hicieron directamente sobre la pared seca, no pintadas al fresco, y en la mezcla de los pigmentos se utilizó el óleo como un elemento más. Estaba en una pared lateral junto a otra obra titulada "Dos brujas" de las que no se conoce nada más pues se vendió y en la actualidad no se sabe si existe.

Esta imagen que vemos está tratada y reinterpretada en el blog para mostrar lo que en la fotografía en BN se observa. Unos posibles pájaros volando, no queda claro si (casi seguro) dos o tres. Pero a su vez, hay dudas de si realmente son lo que parece, o rasponazos de la obra sobre la pared simulando unas pequeñas aves. 

Lo cierto es que esos detalles oscuros que simulan aves ya no están en la obra que ha pasado a nuestros días, y nunca sabremos qué era lo que realmente intentaba decirnos Goya con la mirada de ese perro en su propio salón. 



30.12.24

Mujer Nubia, de Josep Tapiró Baró


Esta acuarela fue pintada en el año 1891 por el artista catalán Josep Tapiró Baró, un pintor de Reus conocido por sus retratos orientalistas, influido por la forma de trabajar de Mariano Fortuny, ambos de Reus y que vivieron en los mismo años.

Se marchó a Marruecos en donde realizó una gran cantidad de trabajos etnográficos de personas de esa zona, con gran detalle de vestimentas y adornos. También trabajó en acuarela siempre, escenas de la vida cotidiana de Marruecos o de otras zonas de África.

La obra que vemos arriba la tituló: "Mujer Nubia" reflejando que era una mujer de la zona alta de Egipto.

25.11.24

El tiempo y las viejas, de Francisco de Goya


El cuadro titulado El tiempo y las viejas o ¿Que tal?​ es una obra del pintor Francisco de Goya, pintado en el año 1810, cuando los encargos oficiales escaseaban por culpa de la Guerra de la Independencia. Es una sátira similar a las obras en grabado de los Caprichos, pero en este caso pintado al óleo sobre lienzo y con casi dos metros de altura.

Junto a otros dos cuadros de la época, son obras pintadas por Goya sobre lienzos que ya contenían otras obras, unas alegorías de unos grabados de Adriaen Collaert, posiblemente pintados en el siglo XVII, y que nos da una muestra de la escasez de elementos para poder pintar en aquellos años de hambre, guerras y carencias de casi todo.

La protagonista es una vieja decrépita y escuálida, sentada en compañía de una fiel amiga, ambas ricamente ataviadas y enjoyadas, haciendo gala de coquetería, y de una vida acomodada venida a menos posiblemente por la Guerra de la Independencia, situación económica que se sugiere por las sencillas sillas sobre las que se sientan. Luce un vestido de gasa a la moda francesa la mujer rubia, y un traje negro la más anciana.

Detrás de ambas mujeres que se miran en un espejo, aparece "El Tiempo" amenazando a las mujeres con una escoba, mientras ellas se miran en el espejo en donde leemos la frase de: "Que tal?".

Es una de las dos pinturas de Goya en la colección del Palais des Beaux-Arts en Lille, junto al titulado "La carta". Esta obra de "El tiempo y las viejas" se puede ver en Madrid, en el Museo del Prado durante los últimos meses de 2024 y los primeros de 2025.

21.9.24

Abel Fabre, escultor y profesor de arte en Francia


Este relieve en una fachada de Toulouse la traigo solo por un detalle. Es una gran obra hecha por el escultor francés y profesor de Arte Abel Fabre en el año 1894. Pero el detalle que quiero señalar es el velo que cubre la boca de la figura de la derecha. 

Parece hecho son seda en vez de piedra, semeja ser real consiguiendo un efecto de transparencia muy bien realizado.