11.2.21

Para dibujar: Rotuladores y bolígrafos. Herramientas muy sencillas de usar

Hoy el mundo de los bolígrafos o de los rotuladores como herramientas para dibujar es amplísimo. Desde herramientas sencillas que solo se publicitan para escribir a otros elementos que se compran en tiendas de Arte y sus tintas son todavía más permanentes y que podemos encontrar además en numerosos grosores de trazo e incluso en muy numeroso color de tinta.

Pero además ya hay rotuladores con terminación en pincel, rotuladores que se pueden cargar de tintas o de pinturas, incluso que según la posición de uso permiten ligeros cambios de grosor en la línea.

La gran ventaja del rotulador o del bolígrafo es que siempre están dispuestos para su uso, es una herramienta de dibuja muy rápida de usar y muy sencilla, que se conservación es perfecta y sin trabajo extra, que hoy hay ya decenas de formas distintas y que además en la mayoría de los casos es muy barato tener una pequeña colección de ellos.

Un bolígrafo o rotulador es muy rápido en el trazo, aunque su inconveniente es que el trazo es siempre del mismo grosor excepto si empleas el de terminación en pincel. Pero depende del tipo de trazo que hagas esos grosores puedes simular diferentes grosores a base de reforzar zonas o de utilizar diversos rotuladores o bolígrafos de distinto calibre.

Han venido a sustituir a la clásica plumilla con tinta, y aunque son herramientas diferentes y que otorgan distinto tipo de trazo, su versatilidad les están dando cada vez más protagonismo. Mi consejo es que la tinta siempre sea permanente.