14.6.18

La Cultura se merece más trabajo y calidad distribuida por todo

Màxim Huerta se equivocó cuando hace ya muchos años consultó con su asesor de qué forma se pueden pagar menos impuestos. Y se volvió a equivocar cuando decidió ponerle una demanda a Hacienda para que le dieran los juzgados la razón. Y tras una sentencia con palabras duras y claras, se volvió a equivocar cuando decisión aceptar el cargo de Ministro de un gobierno socialista. Y se equivocó otra vez más cuando no le dijo al Presidente Pedro Sánchez que tenía sobre su cabeza una sentencia muy fea. Y terminó equivocándose en una semana de Pasión cuando en sus palabras de despedida puso adjetivos calificativos que aunque le salieran del corazón nunca debían salir de su boca.

El nuevo Ministro de Cultura José Guirao Cabrera me gusta (también me gustaba Màxim Huerta) por los buenos momentos que ya me ha ofrecido en sus trabajos anteriores. Soy asiduo del Reina Sofía y de la Casa Encendida, cercanos espacios de arte contemporáneo y de modernidad contemplativa y formativa, y sus trabajos siempre me han parecido muy interesantes, como me lo parecen los actuales con otros directores. 


A veces en España no valoramos bien lo que tenemos, sobre todo sin antes compararlos con otras maravillas que se ofrecen por el mundo mundial y que están a la misma altura que las que hacemos en España.