17.5.22

La peor fotografía de todas es la que no se hace


Uno puede pretender algo y no ser capaz de conseguirlo nunca. En fotografía sucede con los deseos de disponer de una buena iluminación en un encuadre que sea complicado de visitar. A todos nos ha sucedido que una misma imagen, al verla e ir a disparar la cámara, observas que la luz es mala, no es la deseada, no es la mejor iluminación para la escena. Pero tienes unos segundos, muchas veces estás de viaje y no puedes volver al lugar para intentar cazar una mejor iluminación, etc.

La peor fotografía de todas es la que no se hace. Y partiendo de esa premisa, aunque la iluminación, el color o el encuadre incluso, no sean perfectos para tus gustos, DISPARA y luego en tu laboratorio digital ya veremos qué se puede hacer. Y si no puedes hacer gran cosa, siempre te quedará el recuerdo de que aquello fotografía la hubieras deseado más cálidas o con sol, pero fue imposible. Y te acordarás de aquel día nublado y frío, con una imagen que tiene sus defectos.