24.2.23

¿Escribimos de lo que queremos o de lo que quieren los personajes?


La frase se puede leer en la pared de una biblioteca de Madrid. En una de las salas de lectura iluminada con luz natural y silencio.

"Un escritor no escoge sus temas, son sus temas quienes le escogen".

Los escritores elegimos de qué hablar, e incluso creemos que escribimos de lo que queremos. Somos libres, excepto porque vamos llenos de mochilas. Parece que elegimos los temas sobre los que creemos entender algo. 

Esto ya de entrada es falso. Pero además todo escrito, si se hace con vehemencia, se va apoderando del escritor. Se retuerce. Se va apoderando poco a poco de las ganas, va girando, va incorporando esquinas y detalles, se rebela, obliga a crear nuevos puntos de vista o nuevos personajes.

Lo podemos tener muy claro, aunque más claro todavía lo tienen los propios párrafos, sus sonidos, sus colores, sos ganas de rebelarnos de nuestra función.